Los grandes avances a partir de la decodificación del genoma humano en los últimos 15 años, han generado un fuerte impulso a la investigación de las enfermedades y el desarrollo de tratamientos más efectivos. Entre las áreas beneficiadas destaca la oncología, con significativas mejoras en las expectativas de recuperación de los pacientes.
"Nuestro organismo tiene mecanismos genéticos que regulan y evitan que progresen las células cancerosas. Pero cuando se pierde el equilibrio entre los encargados de producir o inhibir su aparición, comienza a crecer el tumor. Y ambas partes de este sistema son reguladas por los genes", explica el jefe del Departamento de Oncología de Clínica Alemana, doctor Felipe Capdeville.
La mejor comprensión de los procesos biológicos a nivel molecular sentó las bases de la medicina de precisión en cáncer, cuya capacidad de estudiar las características de cada paciente le permite establecer tratamientos "a la medida" de ellos. Estos avances científicos también implicaron un fuerte desarrollo de la inmunooncología, especialidad que maneja las defensas del propio organismo para combatir los tumores.
"Más y mejor inmunoterapia aplicada al tratamiento de esta enfermedad, es el otro gran hito de los últimos años", subraya el especialista.
A la fecha, la medicina de precisión y la inmunoterapia han tenido sus mejores resultados en cánceres como el de pulmón y el melanomamaligno. En este último ha habido un importante avance. "Hace pocos años prácticamente no había nada que hacer en un paciente con diagnóstico de metástasis", indica el doctor Capdeville.
A partir de las investigaciones que perfeccionan su capacidad de regular los procesos del sistema inmunitario, la oncología cuenta con medicamentos que "actúan sobre las células encargadas de eliminar el tumor, activándolas para que mejoren esa función estableciendo una herramienta muy efectiva".
La medicina personalizada, o de target, no sólo identifica a cada tumor, sino también a sus diferentes subtipos y características moleculares específicas. "Esto posibilita atacar algunas alteraciones genéticas presentes en los pacientes, y lograr en ellos una mejor sobrevida", señala.
Gracias al alto estándar de sus equipos y tecnología, el nuevo Laboratorio de Diagnóstico Molecular y Biomarcadores de Clínica Alemana cuenta con la mayor capacidad de estudio genético en el país con la secuenciación simultánea de 50 mutaciones de genes en tumores. Junto al melanoma, entre sus principales áreas de trabajo están los cánceres de mama, pulmón, colorrectales y gliomas cerebrales.
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